“Así que, hermanos míos amados y deseados, gozo y corona mía, estad así firmes en el Señor, amados.”
(Filipenses 4: 1)
La inestabilidad espiritual conduce a la duda, la desilusión, el desanimo y el testimonio ineficaz. El apóstol Pablo le escribe a los filipenses un mandato en el que trata la cuestión decisiva de cómo ser estables en su vida espiritual: “Así que, hermanos míos amados y deseados, gozo y corona mía, estad así firmes en el Señor, amados.” (Filipenses 4: 1) Este es un imperativo, una orden casi de connotación militar. Al igual que un soldado en la batalla, los cristianos debemos mantenernos en posición mientras enfrentamos los ataques. No debemos flaquear en medio del rechazo y la persecución, ni fracasar en la prueba y quejarnos o ceder a las tentaciones y al pecado.
Esta firmeza del acero, solo es posible en el Señor. A todo lo largo de la toda la carta a los Filipenses, el énfasis no es en nuestras circunstancias o en otros o en nosotros mismos, sino en el Señor, el es nuestra fuente de poder y seguridad, vida y amor, confianza y gozo.
En un mundo como el nuestro, es fácil quedar enganchados en el sistema y perder nuestra estabilidad, de ahí la orden “Estad firmes”. En otras palabras, no dejar que las subidas y bajadas nos remuevan… asirnos firme de la relación eterna que tenemos con el Señor y no permitir que se pierda.
El mismo Señor Jesucristo nos da la firmeza que necesitamos, el comprende nuestra condición, recuerda que el estuvo entre nosotros y se mantuvo firme. Enfrentó persecución y rechazo, pero nunca cedió: El “sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo” sin desmayar (He. 12: 3). Él, “fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado.” (He. 4: 15). Frente a una prueba mucho más difícil de la que haya soportado jamás un creyente, “Jesús… por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios.” El es nuestro ejemplo de estabilidad, El es también nuestra fuerza para seguir adelante y para permanecer en pie cuando todo a nuestro alrededor se derrumbe.

Comparta!